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jueves, 20 de febrero de 2014

1.500 metros cuadrados de glamour

-Un pequeño análisis del evento de los eventos-

Se acercan los Oscars, pero por mucha estrella de Hollywood, ella se lleva un cachito de protagonismo todos los años. Hablamos de la alfombra roja, con 150 metros de largo y 10 de ancho, que hacen 1500 metros cuadrados de glamour  donde las actrices lucirán sus vestidos de diseño y los actores… la pajarita negra que manda el protocolo.
Durante dos días, un equipo de 25 personas colocará todas las secciones de la alfombra cuidadosamente para que no quede ni una arruga y nadie tropiece haciendo una entrada triunfal en el Teatro Dolby (más conocido por su antiguo nombre, Teatro Kodak), el anfitrión de los Oscars desde el 2002.


La colocación de la alfombra



La planificación de los Oscars no sucede en solo dos días, una gran variedad de profesionales están plenamente involucrados para que el gran evento se desarrolle sin problemas. Hay un montón de tareas que llevar a cabo: las invitaciones, la iluminación, los temas de la ceremonia, la gestión de los equipos de televisión… Pero sin duda, el mayor quebradero de cabeza para los organizadores de este gran evento es ¿quién se va a sentar al lado de quién? ¿Qué pasaría si se sentaran juntos Brad Pitt, Angelina Jolie y Jennifer Aniston? Es como la organización de los asientos de las bodas, donde sabes que algunos familiares no se pueden ni ver, pero a gran escala ya que la capacidad del teatro es de unas 3.400 personas… También hay otras normas en cuanto a los asientos, los nominados deben colocarse cerca del pasillo para que salgan  sin dificultad a recoger el premio y nunca juntos, porque no se deben ver las caras de tristeza de los perdedores junto a la cara de alegría del ganador (de eso ya se encargarán las cámaras).



La ceremonia dura horas, los discursos se hacen eternos, incluso, aburridos… pero cuando las cámaras enfocan, todos los asientos están llenos. ¿Es que nadie se mueve de su asiento ni para ir al baño? No, los actores y actrices salen incluso a tomar el aire durante grandes ratos, pero unas 100 personas son contratadas como relleno de seguridad y son entrenadas para desplazarse cubriendo las sillas vacías.


Un relleno de seguridad en dos asientos diferentes

Y una vez que acaba la gala, continúan los cuidados de nuestra gran protagonista, la alfombra roja, que es recogida y enviada a un almacén de California donde la limpian durante 10 días dejándola como nueva para el próximo año (aunque la renuevan cada dos años). Y otra vez de nuevo, a pensar en la organización del año siguiente…  Así que nosotros, sin duda, le damos el Oscar a la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas que es quien organiza tan magno evento.



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